10 de enero de 2025 en cines
Dirigida por Greg Kwedar
Guión Clint Bentley y Greg Kwedar basado en historias de Clarence Maclin y John Divine G Whitfield y en The Sing Sing Follies, de John H. Richardson, y Breakin' The Mummy's Code, de Brent Buell.
Reparto Colman Domingo, Paul Raci, Clarence "Divine Eye" Maclin, David Giraudy, Patrick Griffin y Sean San José.
Duración 1 h 45 m
Por qué hay que verla
Una película conmovedora sobre el poder sanador del arte, y dotada de una gran fuerza emocional gracias a la actuación de Colman Domingo (nominado al Oscar en 2024 por Rustin). Tanto la película como Domingo han sido señalados ya como favoritos para la próxima temporada de premios.
Al actor le acompaña, además, un elenco actoral en estado de gracia, comoun grupo de hombres que fueron alumnos del programa durante el tiempo en el que estuvieron encarcelados en Sing Sing, incluidos Clarence «Divine Eye» Maclin y Sean San José.
Sing Sing es un drama basado en hechos reales donde un pequeño grupo de personas encarceladas en el Centro Correccional Sing Sing, una de las prisiones de máxima seguridad más famosas del mundo, intenta montar su propia producción original como parte de un taller de teatro. A través de las artes escénicas, estos hombres consiguen ver el mundo como un lugar por el que luchar.
Sobre la inclusión de actores no profesionales, Greg Kwedar comenta: “Sabíamos que queríamos contar con algunos profesionales, pero la mayoría del conjunto tenía que estar formado por antiguos alumnos del programa. Y confiábamos en ello, porque sabíamos que el talento estaba ahí». Aunque los hombres no tenían experiencia en cine y televisión, contaban con décadas de experiencia sobre el escenario, en Sing Sing y en otros lugares, algunos llevaban fuera 10 años, otros sólo unos meses.
Clint Bentley, guionista y colaborador habitual de Kwedar, menciona: «Cuando hicimos Jockey, nos dimos cuenta de la importancia de dar espacio a la gente en una película para que describiera su propia vida, su propio mundo, con sus propias palabras (…) Eso se hizo aún más importante para este proyecto. Nunca se nos habrían ocurrido las palabras que transmitieran las experiencias por las que habían pasado estos hombres». Kwedar añade: «Así que redoblamos el enfoque con el que nacimos con Jockey, y las escenas más profundas de la película son simplemente estos hombres hablando por sí mismos».